

En Vivo
Mr. Big: La cara más auténtica del hard rock
Published
9 años agoon
Siempre resulta reconfortante recibir en nuestro territorio a uno de los grandes exponentes del hard rock a nivel mundial, como lo son los californianos de Mr. Big, y más aun cuando este encuentro se lleva a cabo en un escenario tan íntimo como el que ofrece el Teatro Nescafé de las Artes. Esta segunda visita de los nativos de Los Angeles se enmarca dentro de la gira de promoción de su más reciente, y octavo álbum de estudio, “…The Stories We Could Tell” (2014), en donde además se celebran 25 años de una exitosa trayectoria. Adicionalmente, y subiendo aun más la apuesta, los liderados por Eric Martin regresan a nuestro país con su alineación original, sólo sintiendo la ausencia en la batería de Pat Torpey, quien a raíz de padecer del mal de Parkinson ha tenido que ceder su lugar a Matt Starr, quien, sin embargo, sigue aportando con algunos coros y percusión.
La responsabilidad de calentar el ambiente recayó en Cler Canifru, talentosa guitarrista y cantautora nacional, quien se ha desarrollado principalmente como músico de sesión, y que recientemente editó su EP debut, “Posavasos” (2014). Una acotada presentación de siete canciones, destacándose los singles “Escorpiones”, “West Point” y una aceptable versión del clásico de Beastie Boys, “Sabotage”, sirvieron para evidenciar una propuesta muy rockera, con sonidos potentes e intensos, que en cierta medida conspiraron en hacer que la voz de la cantante no se escuchara tan nítida y que a ratos se viera eclipsada por el resto de la instrumentación.
Promediando las 20:30 hrs. se apagan las luces del recinto de Manuel Montt, y en medio de una estruendosa ovación hacen su aparición los miembros de Mr. Big, que uno a uno van tomando ubicación en el escenario, ante la mirada de cada uno de los fanáticos que esperaron casi cuatro años para reencontrarse con sus ídolos. Desde el primer acorde de “Daddy, Brother, Lover, Little Boy (The Electric Drill Song)”, queda en evidencia que la fuerza y la potencia serán protagonistas de la velada, con la batería de Starr sonando demoledora y con secuencias de cuerdas perfectamente ejecutadas. A priori, no logra encajar la presencia de asientos en un concierto de este estilo, pero sólo bastan un par de minutos para que la presentación retome su curso normal y que la mayoría de los asistentes abandone la comodidad de sus butacas para vivir el show de pie frente a los músicos. Sin lugar a dudas, uno de los momentos más llamativos de esta primera canción la protagonizan Paul Gilbert y Billy Sheehan, cuando tocan la guitarra y el bajo respectivamente, con un taladro reacondicionado con púas pegadas en la broca.
En “Gotta Love The Ride” y “American Beauty” el aplanador pulso de la batería resuena en todo el recinto, acoplándose a la perfección con la exquisita ejecución de Gilbert y Sheehan, quienes aprovechan cada secuencia de cuerdas para dar muestras de su dominio y depurada técnica. A pesar de la intensidad sonora y la potente propuesta de Mr. Big, en “Undertow” la trabajada voz del frontman logra sobresalir, sonando nítida y cristalina, y manteniendo esa textura tan característica que los catapultó a la fama a principios de los noventa. Siguiendo con la dinámica de ostentar su destreza en el manejo de las cuerdas, Paul y Billy montan una suerte de batalla de solos, donde a pesar de conocer sus múltiples pergaminos, siguen sorprendiendo con la facilidad de transformar sus instrumentos en verdaderas extensiones de sus cuerpos. Los oriundos de Los Angeles parecen decididos a arrasar con el público chileno, lo que queda en evidencia en “Alive And Kickin’” y “I Forget To Breathe”, temas que resaltan por ráfagas llenas de energía y una dinámica incesante, donde además destaca la aparición de Pat Torpey, quien acompaña con el sonido de los panderos.
Las secuencias llenas de frescura, vitalidad y desbordante energía, en ningún caso delatan el paso de los años en los experimentados músicos, muy por el contrario, parece tenerlos en su mejor momento artístico, lo que, para fortuna de sus fanáticos más recalcitrantes, sugiere que los tendremos girando por un buen tiempo más. “Take Cover” y “Green-Tinted Sixties Mind” siguen demostrando un sonido que raya en la perfección, sin puntos bajos, y donde cada uno de los músicos se esfuerza por lograr su mejor presentación. Como un certero golpe al mentón llega “Out Of The Underground”, con la batería de Matt Starr que no para de golpear con una fuerza inagotable, y combinaciones de cuerdas que no dejan escapar ni una sola nota. El resto de la banda abandona el escenario y llega el turno de Paul Gilbert de asumir el protagonismo, despachándose un memorable solo de guitarra que no deja a nadie indiferente; una demostración maestra de control y dominio, con exquisitos cambios de ritmo y una técnica infalible que denota años de experiencia. Las muestras de excelencia seguirían haciendo su aparición en sutiles pinceladas, como por ejemplo en “Rock & Roll Over”, donde Gilbert toca la guitarra con los dientes.
Eric Martin pide alumbrar hacia el público para establecer un contacto mucho más cercano con sus fieles seguidores, quienes si bien es cierto no lograron repletar el Nescafé de las Artes, durante toda la velada derrocharon la energía propia de una multitud. Con “As Far As I Can See” las revoluciones se mantienen en lo más alto, con un sonido incesante que no da tregua y que promete dejar a todos sin aliento. El vocalista se cuelga la guitarra acústica, mientras que Pat Torpey ocupa su lugar en el centro del escenario para tocar los panderos, y con el marco de una melodía mucho más relajada y sensible, y con el apoyo de miles de voces sonando al unísono, interpretan “Wild World”, original de Cat Stevens, configurando uno de los momentos más significativos del show. Siguiendo con la línea más melódica hace su aparición “East/West”, que poco a poco crece en intensidad, siendo acompañada por las palmas de un público muy participativo. Una cerrada ovación amenaza con demoler el recinto de Providencia, cuando Torpey releva a Starr en la batería para ejecutar la exquisita “Just Take My Heart”, canción que es introducida por un perfecto y bello solo de guitarra de Gilbert, que arranca una lluvia de aplausos desde lo profundo del corazón de la audiencia.
Matt Starr retorna a la batería, mientras que entre Martin y Sheenan hacen un repaso de todos los lugares que han visitado durante la gira, y en donde para cada país mencionado el bajista se despacha alguna palabra relacionada. Tras este didáctico preámbulo comienza a sonar la potente “Around The World”, con un sonido desenfrenado que muestra el lado más crudo del hard rock, exhibiendo una impronta fecundada en base a sólidas secuencias de cuerdas y una batería demoledora. La banda se va del escenario, y ahora es el turno de Billy Sheehan de mostrar lo mejor de su repertorio solista, desafío que acepta de inmediato y en donde no decepciona, muy por el contrario, hace gala de una de las mejores técnicas en las cuatro cuerdas que se tenga recuerdo. Una ejecución que parece salida de otro mundo, haciendo perfectas transiciones entre diferentes posturas y melodías, un derroche de talento que juega con la exageración y que recibe la aprobación del público en forma de una lluvia de aplausos que resuena en cada rincón del teatro. En la dinámica y enérgica “Addicted To That Rush”, el frontman interactúa con los fanáticos, quienes al igual que toda la presentación participan activamente, en una muestra incondicional de fidelidad y compromiso con Mr. Big. Los músicos abandonan el escenario y de inmediato comienzan los cánticos y silbidos que claman por el regreso de los californianos.
Al cabo de unos pocos segundos los músicos regresan en medio de un aluvión de aplausos, y Eric Martin aprovecha de presentar a cada uno de los miembros que configuran Mr. Big, siendo Torpey el que se lleva las mayores muestras de cariño. Cualquier banda de hard rock que se respete, debe tener al menos una power ballad que sea reconocida en el mundo entero y que haya servido de inspiración para atreverse a dar el primer beso en algún baile adolescente. En el caso particular de Martin y compañía, la canción perteneciente a este selecto grupo es el clásico “To Be With You”, tema que para su lanzamiento en 1991 ocupó el primer lugar de los rankings en 15 países, y que ahora, desde el primer acorde, recibe el acompañamiento de cientos de voces que se amalgaman en una postal inolvidable. Los californianos arremeten con toda la velocidad y fuerza de “Colorado Bulldog”, en donde resalta la impecable capacidad vocal del frontman, quien no evidencia el agotamiento de casi dos horas de rock.
En una jugada bastante simpática y sorpresiva, se produce un cambio de roles entre los miembros de la banda, sentándose en la batería Gilbert, mientras Starr y Sheehan asumen el mando de las guitarras, Martin del bajo, y la responsabilidad de la voz es delegada en el querido Pat Torpey. Con esta nueva alineación dan vida al clásico “Living After Midnight” de Judas Priest, que nuevamente es coreada por todos los asistentes y que se alza como uno de los puntos altos de la presentación. Los músicos retoman sus ubicaciones normales para quemar los últimos cartuchos de energía y cerrar el show con la interpretación de las canciones: “The Light Of Day” y “Mr. Big”, original de los ingleses de Free, que cuenta con la participación de Torpey en la batería, en una melodía a medio tiempo llena de potencia y vitalidad. Los músicos se reúnen en el centro del escenario, se despiden de sus fanáticos, agradeciendo el compromiso y fidelidad, y desaparecen tras bastidores mientras comienza a sonar el tema “The Show Must Go On” de Queen.
Como si no fuesen suficientes las altas temperaturas que han azotado la zona central del país este verano, Mr. Big se encargó de calentar aun más el ambiente, en base a un impecable show de más de dos horas de duración, donde desplegó lo más selecto de su repertorio, además de hacer un repaso por su más reciente álbum de estudio, “…The Stories We Could Tell”. La propuesta de los californianos destaca principalmente por transitar en una exquisita dualidad, permitiéndoles montar una presentación que desde el punto de vista técnico raya en la perfección, resultando poderosamente atractiva, pero sin necesidad de echar mano a toda la parafernalia propia del género. Algunos podrán criticar que la sonoridad de Mr. Big carece de matices, y que a ratos abusa del volumen y la intensidad, pero lo realmente cierto es que lo vivido esta noche no tiene su mayor mérito en lo estrictamente musical, sino más bien en la autenticidad con que la banda asumió el desafío de dejarlo todo en el escenario.
Setlist Cler Canifru
- Escorpiones
- Buzo
- Valle De Profetas
- Bandurria
- De La Luz
- West Point
- Sabotage (original de Beastie Boys)
Setlist Mr. Big
- Daddy, Brother, Lover, Little Boy (The Electric Drill Song)
- Gotta Love The Ride
- American Beauty
- Undertow
- Alive And Kickin’
- I Forget To Breathe
- Take Cover
- Green-Tinted Sixties Mind
- Out Of The Underground
- The Monster In Me
- Rock & Roll Over
- As Far As I Can See
- Wild World (original de Cat Stevens)
- East/West
- Just Take My Heart
- Fragile
- Around The World
- Addicted To That Rush
- To Be With You
- Colorado Bulldog
- Living After Midnight (original de Judas Priest)
- The Light Of Day
- Mr. Big (original de Free)
Por Gustavo Inzunza
Fotos por Luis Marchant
Compártelo:
- Clic aquí para compartir en Facebook. (Se abre en una ventana nueva)
- Click to share on WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Click to share on Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Tumblr (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Pinterest (Se abre en una ventana nueva)
- Pincha para compartir en Pocket (Se abre en una ventana nueva)
- Click to email a link to a friend (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

En momentos donde la memoria emerge como acto reflejo tras un oscuro día sábado lluvioso, pareciese que la música se vuelve un viaje en el tiempo, donde nuestra historia se hace vívida en un recuerdo. Sin planificarlo ni intencionarlo, este sería el contexto en donde se llevaría a cabo una nueva visita de Virus, una de las banda trasandinas más queridas en territorio nacional.
Entre sobrios abrigos, chaquetas y paraguas, el Teatro Coliseo comienza a tomar forma. Los primeros asistentes no dudan en tomar los puestos privilegiados para esta jornada de recuerdo, baile y clásicos del rock latino. Mientras sigue ingresando el público, se hace evidente que la música es un legado que también se puede transmitir de generación en generación, ya que las y los asistentes que se convocan a este espacio, también son jóvenes, hijas e hijos.
Zebra 93 fueron los encargados de iniciar esta jornada. La banda que se compone de dos chilenos y una argentina, logran capturar la atención de la decena de responsables asistentes que llegan al recinto de Nataniel Cox pese al frío, la lluvia y tenue neblina; por lo mismo, es que buscan entrar en calor en tiernos y tímidos pasos de baile al ritmo de un carismático electropop, por este motivo, tracks como “Veleros”, “Otros” y “Las Olas” se vuelven la previa de una dichosa y feliz noche, como metáfora y acción.
Tras finalizar una cándida presentación, Zebra 93 se despide con “Corazonada”, el recinto con más de la mitad de su capacidad, cede ante la delicadeza de este afectuoso track. Entre buenos deseos, la banda deja el escenario y comienza la cuenta regresiva para la visita de Virus en Chile, por lo mismo, el staff de la banda raudamente sale por los costados del escenario, acomodando y probando instrumentos bajo el alero y liderazgo de una roadie mujer, quien con impoluta seguridad, se destaca con proeza en el momento más íntimo de los shows en vivo.
Sin vacilaciones, la banda sale al escenario en coordinada elegancia. Evitando las aletargadas introducciones, Virus comienza su presentación con “Sin Disfraz”, dejando en claro que sus propios éxitos son la mejor manera de romper el hielo. Continuamos con “Tomo Lo Que Encuentro”, “Lugares Comunes” y “Pecados Para Dos”, sentenciando que “Locura” (1985) es uno de los discos más importantes de su carrera, pero también es un disco esencial en la música latina, apostando por sonidos y acordes llamativos para apropiarse de la retórica de la sexualidad, como un campo de democratización del placer y no un secreto a voces.
El público rendido ante coros colectivos y bailes de cargada energía, dan cuenta que la primera resistencia es reapropiarse de la música y el baile, aunque el contexto jamás lo permita, una premisa que se plasma en la historia de la banda que también se encarna en el legado de Federico Moura, quién hoy se hace presente en este show por su capacidad propositiva, pero también en las gráficas que dibujan su rostro en “Dicha Feliz”, logrando que la decena de asistentes se refugien en esta interpretación colectiva, que guarda memorias que se guardan en lo más profundo de nuestro silencio.
Virus deja el escenario con todos los éxitos de su carrera a disposición de un público que los siguió desde juventud y que hoy vuelven con más años, algunos vuelven de la mano con sus hijas e hijos, mientras que otras y otros asistentes se hacen presentes por el legado histórico que esta banda significa en lo musical y lo personal. “Wadu-Wadu”, “Una Luna de Miel en la Mano” y “Carolina”, son los tracks que cierran esta potente velada que ni el frío, pudo cesar el fulgor de este público que se declara en dicha feliz. Caras de asombro, alegría y satisfacción dejan el recinto que se transformó en un viaje en el tiempo. Volvemos al 2023 con frío y hambre, pero siempre reflexionando en las palabras de Federico Moura que se toman la presentación, porque sí, es verdad: “Hay que salir del agujero interior”.
Setlist
- Sin disfraz
- Tomo lo que encuentro
- Lugares comunes
- Pecados para dos
- Dame una señal
- Superficies de placer
- Imágenes paganas
- Destino circular
- Ausencia
- ¿Qué hago en Manila?
- Desesperado secuencia uno
- Dicha feliz
- Despedida nocturna
- Transeúnte sin identidad
- Los sueños de Drácula
- Amor descartable
- El probador
- Densa realidad
- Pronta entrega
- Hay que salir del agujero interior (Federico Moura en las Gráficas)
- Wadu-Wadu
- Mirada Speed
- Una luna de miel en la mano
- Carolina
IR A LA GALERÍA FOTOGRÁFICA
Compártelo:
- Clic aquí para compartir en Facebook. (Se abre en una ventana nueva)
- Click to share on WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Click to share on Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Tumblr (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Pinterest (Se abre en una ventana nueva)
- Pincha para compartir en Pocket (Se abre en una ventana nueva)
- Click to email a link to a friend (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)
Discos


GEL – “Only Constant”
“Hardcore these days is kinda fucking cool”, sentencia una de las voces en el collage de grabaciones que se escuchan...


Weyes Blood – “And In The Darkness, Hearts Aglow”
Tres años pasaron desde que Natalie Mering estrenara el cuarto trabajo de estudio de su proyecto Weyes Blood, llevándose el...


Dry Cleaning – “Stumpwork”
A la primera escucha, pareciera bastante tímido lo que propone Dry Cleaning en su segundo álbum. Tan sólo un año...


OFF! – “Free LSD”
Luego de ocho años de pausa discográfica, OFF! vuelve a las pistas con un álbum que, de primera impresión, traza...


La Ciencia Simple – “Ritmos En Cruz”
Desde “Hacia El Mar” (2014), La Ciencia Simple ha propuesto una reconfiguración de su sonido, pasando por el post rock...


Yeah Yeah Yeahs – “Cool It Down”
A casi 20 años de la explosión del post-punk, o garage revival (que cada uno le ponga la etiqueta que...


Dead Cross – “II”
Con tantos proyectos que posee Mike Patton, no es difícil perder la pista de cada cosa que hace el frontman...


Arctic Monkeys – “The Car”
El lanzamiento de su séptimo disco no era un paso más en la carrera de Arctic Monkeys. Tras un “Tranquility...


Slipknot – “The End, So Far”
Fuerte y claro fue el mensaje que Slipknot entregó con “We Are Not Your Kind” (2019), una obra que vio...


A.A. Williams – “As The Moon Rests”
Bastó solo el lanzamiento de “Forever Blue” (2020) para que la música de A.A. Williams comenzara a ser destacada por...

Afterlife llega a Santiago en la noche de Año Nuevo

Anuncian show de Max Romeo en Chile

Chief Xian aTunde Adjuah se presentará en Chile

Gobierno emite comunicado respecto a cancelación de eventos masivos por Juegos Panamericanos

Gobierno decreta suspensión de eventos masivos durante los Juegos Panamericanos Santiago 2023

Estreno en Cines: Metallica – “72 Seasons”

Nuevo video de Paramore: “Running Out Of Time”

Nueva canción y video de Paramore: “The News”

Mr. Bungle publica “The Night They Came Home” de manera gratuita

Nacho
17-Feb-2015 at 11:31 am
fue un tremendo show!