Eléctrico como el azul de su atuendo; intergaláctico como los instrumentos que acompañaron su voz; apocalíptico como las imágenes que pasaron por las pantallas. Así fue el show que la islandesa Björk nos brindó en Lollapalooza Chile 2012. Un lujo para el público que repletó la elipse del Parque O’Higgins, tras las presentaciones de Arctic Monkeys y Cage The Elephant.
Vestida con el traje y la peluca naranja característica del disco “Biophilia” (2011), y apoyada de un coro compuesto por una veintena de chicas, apareció Björk Guðmundsdóttir sobre el Claro/LG Stage. Con un elegante retraso (de un par de minutos), comenzó a sonar “Cosmogony”, primera orden del cataclismo que se nos vendría encima: una canción cautivante, con el aporte exacto de las máquinas y del grupo de coristas, con tonos tan celestiales como apocalípticos. El show continuó con “Hunter”, un clásico con más de 14 años de vigencia. Así, combinando hits de toda su carrera con lo nuevo de “Biophilia”, pasarían “Thunderbolt” y “Hidden Place”.
Hasta allí, un espectáculo muy solemne y de gran calidad, pero el zarpazo de la islandesa llegó con “Crystalline”, el primer single de su último larga duración, donde su voz, combinada con la programación del Gameleste (el juguetito que creó para el nuevo disco), explota hacia el final para despedazar toda la electrónica que incluye este track. Inmediatamente siguió con “Jóga”, single con un coro inconfundible del “Homogenic” (1997), otro gran momento del show.
Así pasaron “Pagan Poetry”, “Hollow” y “Virus”, mientras las pantallas mostraban rayos, erupciones volcánicas y al planeta partiéndose en pedazos, al son de su aplaudido registro vocal. También regaló “One Day”, del disco “Debut” (1993). Otro de los puntos altos del espectáculo fue la esquizofrénica “Pluto”, una canción hecha a la medida para estar dentro de este setlist, por sus arreglos electrónicos. La estadía de Björk en Lollapalooza Chile 2012 estaba llegando a su fin a eso de las 22:40 de la noche, y la encargada de cerrarla sería “Declare Independence” del “Volta” (2007), que nos hizo recordar el show vivido en San Carlos de Apoquindo el mismo año del lanzamiento, con ese armamento de instrumentos futuristas y extraterrestres. “Grracia Chili” decía ella, y de vuelta a camarines.
Parte de las 25 mil personas que a esa hora inundaban la elipse, pensó que la islandesa ya no volvería y empezaron a moverse hacia la salida de Parque O’Higgins. Sin embargo, Björk nos tendría preparado un encore inolvidable: comenzó a sonar la introducción de “Army Of Me” y el mundo dentro del festival se detuvo un par de segundos, para continuar moviéndose al ritmo de una de las más grandes insignias de la autora de “Hiperballad”.
Pedazo de show el de Björk, una artista que en cada nuevo trabajo se transforma en una reencarnación de sí misma. Con un espectáculo hipnótico y una lista de canciones, cuidadosamente elegidas, a la medida de lo que “Biophilia” representó esta noche: el fin del mundo que conocemos y el comienzo de uno nuevo; fuera de esta galaxia y concebido por la islandesa. Porque a la hora de crear, Björk se transforma en una divinidad.
Una de las noches más bellas de mi vida. La vi en 2007, pero esta vez estuvo incomparable. Sonriente y particularmente agradable, simpática… conectada con el público.
Creo que ese día, mi admiración y amor hacia ella, aumentaron en un 1000%
solo con leerlo se me pone la piel de gallina disfrute como nunca lo había hecho en un concierto ella es la mejor llore cuando apareció sobre el escenario
Era el debut más que esperado para una de las bandas más interesantes que surgieron durante los dosmil gracias a “Old World Underground, Where Are You Now?” (2003), que casualmente cumple 20 años desde su lanzamiento. En ese contexto, la banda venía presentando pinceladas de su época debut y mezclando aquello con parte de su último disco “Formentera II” (2023), en una gira que los tuvo por México y Perú antes de aterrizar en nuestro país.
Parece extraño que después de tantos años de popularidad la banda canadiense no haya pisado suelo chileno sino hasta muchísimo tiempo después, saldando así un plazo y una deuda de larga data. Con una carrera en extenso y sólida, el grupo al fin debutaba frente a un buen marco de público en Teatro Coliseo, que se convirtió en una fiesta de principio a fin.
Emily Haines, de brillante atuendo, salía a escena más animada y sorprendida que de costumbre, sintiendo a cada una de las personas del teatro, que hicieron del show un espacio más íntimo que de costumbre. Tras un breve retraso, el grupo no perdió el tiempo con “Cascades”, “Doomscroller” y “Gold Gun Girls”. Con una ejecución más que nítida del resto de la banda, la energía y la onda que emana Haines fluyó y acompañó su voz en un muy buen estado.
Le siguieron el hit “Gimme Sympathy” que hizo bailar a toda la cancha y significó un punto alto del show, con Haines visiblemente sorprendida del recibimiento del público chileno, que la acompañó bailando y coreando cada tema. Con el mismo entusiasmo pasaron “Formentera” y la divertida “Synthetica” para dar paso a “Help I’m Alive”, uno de los tesoros de su época anterior y uno de sus mejores temas. Al cierre, “Combat Baby” desató la locura con sus mezclas de electrónica y guitarras.
Lamentablemente, la espera y la expectativa por tributar su primer álbum era alta en parte del público, que esperaba más canciones de su debut -extrañando, por ejemplo, una interpretación de “IOU”- sin embargo, la banda reapareció en escena para regalar en formato acústico “Calculation Theme”, seguida de “Monster Hospital” y “Black Sheep”, otra de las esperadas por el público y que fue popularizada en la banda sonora de la película “Scott Pilgrim vs. The World”. Al final, la sentida y emotiva interpretación de “Breathing Underwater” fue el cierre perfecto con su atmósfera y cadencia que dejó los ánimos más que calmos para coronar una más que correcta primera visita de la banda a nuestro país.
godual
02-Abr-2012 at 2:52 am
Diosa.
Lalof
02-Abr-2012 at 10:58 am
increíble, una diosa, estuvo icnreíble y las coristas ufff
Daniela
02-Abr-2012 at 6:47 pm
Completamente de acuerdo con todo, pedazo de show!! Björk es una genio, increíble… para mí la mujer más importante en la historia de la música
Highplace
12-Abr-2012 at 1:20 am
Una de las noches más bellas de mi vida. La vi en 2007, pero esta vez estuvo incomparable. Sonriente y particularmente agradable, simpática… conectada con el público.
Creo que ese día, mi admiración y amor hacia ella, aumentaron en un 1000%
(Chicos, por si acaso, es Hyperballad, con Y).
javier
12-Abr-2012 at 1:35 am
Se olvidaron de Unravel, donde se manda pedaso de improvisacion, creo que en esa cancion se demuestra la genialidad de bjork.
elena
12-Abr-2012 at 2:39 pm
solo con leerlo se me pone la piel de gallina disfrute como nunca lo había hecho en un concierto ella es la mejor llore cuando apareció sobre el escenario