En 1958, el escritor Michael Bond creó el personaje El Oso Paddington, un tierno animal parlanchín que se convirtió en un ícono de la cultura infantil inglesa. Ocupando libros e historias para niños, este oso con el nombre de una estación londinense pronto se materializó como figura en peluches, cuadernos, postales, recuerdos y artículos coleccionables. Tal fue su popularidad, que años más tarde protagonizó una serie animada. Por lo mismo, el estreno de su primer largometraje que junta la animación por computadora con personajes de carne y hueso, casi a sesenta años de su primera aparición, trajo a la memoria de aquellos que crecieron con sus historias la nostalgia de un personaje querido y, a su vez, una nueva adición animada para las generaciones más jóvenes.
Luego de sufrir un terremoto en su Perú natal, el oso Paddington (voz de Ben Wishaw) llega a Londres buscando un nuevo hogar, con un papel atado a su cuello que dice “Por favor, cuide a este oso”. Guiado por lo que su familia le habló sobre la amabilidad del país inglés, gracias al explorador que descubrió su especie y que les mostró el mundo de los humanos, Paddington es temporalmente adoptado por el Señor y la Señora Brown (Hugh Bonneville y Sally Hawkins), mientras buscan contactar a otras personas que lo puedan cuidar. La inocente y torpe forma de ser del oso llevará a la familia a distintos límites. En el intertanto, la obsesionada taxidermista, Millicent (Nicole Kidman), se entera de su llegada y busca raptarlo para añadirlo a su colección, con la ayuda del Señor Curry (Peter Capaldi), un intruso vecino.
Para hacer una especie de comparación, “Paddington” para los ingleses es lo que vendría siendo “Papelucho” para nosotros. Ello explica el hype que ha tenido esta adaptación cinematográfica en el viejo continente y todo lo que ha llevado consigo a modo de publicidad. Sin embargo, para aquellos que poco o nada conocemos sobre la historia del animal antropomórfico, se nos presenta la dificultad de abrir el espacio a una figura lejana. Por ende, teniendo en cuenta esta como su primera aparición en nuestro país, resulta difícil otorgarle elogios cuando el argumento va perdiendo su sincronía a medida que avanza la historia. Si bien se nos cuenta el origen del personaje para contextualizarlo, el armado adherido que transforma las fábulas en película se desgasta sucesivamente entre cada gag de comedia presentado.
No hay que dejarse engañar: atributos a su favor tiene. La ternura que evoca el úrsido, con su gorro y chaquetas características, su obsesión por los emparedados de mermelada de naranja, y la animación en su totalidad que proyecta sentimientos certeros reflejados en sus ojos, producen apego y simpatía. Esto es lo que, finalmente, levanta la cinta y la deja en lo alto. Sin embargo, a ratos se vuelve floja y, sea bueno o malo, demasiado empalagosa.
El contar con los apellidos Capaldi, Broadbent y Walters, no necesariamente refleja en pantalla el potencial de cada uno de los actores escogidos, sino que literalmente se pierden apenas avanza la historia. En cambio, Bonneville y Hawkins se esmeran en poner la cuota paterna más allá de la simpleza de sus papeles. En el caso de Nicole Kidman, la sobrecaricaturización de su personaje no termina por convencer como la contraparte maléfica.
A pesar de su eterno desarrollo, termina por ser redonda, familiar y se siente “hogareña”, tanto por la paleta de colores escogida, como la musicalización ocupada con frescos toques latinos. Obviamente está muy bien articulada para ser estrenada en época de adviento.
Por suerte no es como esas nefastas películas que adaptaron personajes de la infancia como blockbuster (haciendo referencia a la desastrosa “Garfield” de 2004, que casi destruyó al gato perezoso que todos conocemos), o simplonas como las cintas-tipo de animales que hablan. “Paddington” exalta a su figura principal y la da a conocer como un emblema de su país, entregando una gama de valores y enseñanzas para el público pequeño, y un amigable acuerdo para sus acompañantes, aunque para otros pueda resultar completamente olvidable.
Únete a la familia global de Metallica el jueves 13 de abril para una Listening Party mundial. Podrás disfrutar en primicia del nuevo álbum de la banda, “72 Seasons”, un día antes de su lanzamiento oficial. En la gran pantalla y con un demoledor sonido envolvente, este evento especial tendrá lugar en los cines en exclusiva y por una única noche.
Funciones:
Mallplaza Calama: 19:30 hrs.
Mallplaza Antofagasta: 19:00 hrs.
Cinépolis Vivo Coquimbo: 19:30 hrs.
Cinépolis Vivo Imperio: 19:00 hrs.
Arauco Maipú: 19:30 hrs.
Cinépolis Plazuela Independencia Puente Alto: 19:00 hrs.
Parque Arauco: 19:30 y 20:30 hrs.
Cinépolis Mallplaza Egaña: 19:30 y 20:30 hrs.
Cinépolis La Reina: 19:00 y 20:00 hrs.
Plaza Maule Talca: 19:00 hrs.
Cinépolis Vivo Outlet Temuco: 19:00 hrs.
Cinépolis Paseo Costanera Puerto Montt: 19:30 hrs.
Arauco Chillán: 19:00 hrs.